Las hermanas católicas de todo el país expresan su decepción y prometen actuar
19 de noviembre de 2019 – Los equipos de liderazgo con sede en Puget Sound de las Hermanas de la Providencia y las Hermanas de Santo Domingo de Tacoma se unen a la Conferencia nacional de Liderazgo de Mujeres Religiosas (LCWR) al respaldar la siguiente declaración sobre la decisión del presidente Donald Trump de retirar a los Estados Unidos del Acuerdo Climático de París:
«La Conferencia de Liderazgo de Mujeres Religiosas (LCWR) se sintió profundamente decepcionada por la promesa del presidente Trump en 2017 de retirar a los Estados Unidos del Acuerdo Climático de París, y estamos profundamente preocupados por la decisión de solicitar formalmente la retirada de los Estados Unidos de este acuerdo internacional de importancia crítica. La enseñanza católica es clara: el cambio climático es un grave problema moral que amenaza nuestro compromiso de proteger la vida y la dignidad humanas, ejercer una opción preferencial por los más vulnerables, promover el bien común y cuidar la creación de Dios. El incumplimiento por parte de Estados Unidos de su compromiso de 2015 deshonra a nuestra nación y amenaza nuestra casa común. Seguiremos alzando nuestras voces contra las políticas climáticas que perjudican a la Tierra y a su gente y abogando por la justicia climática.»
La encíclica «Laudato Si» del Papa Francisco sobre el medio ambiente, publicada en 2015, explicaba el concepto de ecología integral: las complejas formas en que las crisis sociales y medioambientales están interrelacionadas. «La naturaleza no puede considerarse como algo separado de nosotros mismos o como un mero escenario en el que vivimos», escribió el Papa. «Somos parte de la naturaleza».
«Debemos considerar el efecto dominó del impacto de la retirada del Acuerdo Climático de París», dijo la hermana Jo Ann Showalter, SP, líder de la congregación de los dominicos de Tacoma y consejera provincial de las Hermanas de la Providencia. «Es una injusticia que comienza con la degradación del medio ambiente y continúa con la degradación de las comunidades, sobre todo para los marginados. Es inconcebible».