Las Hermanas de la Providencia cerrarán un centro de acogida de emergencia para mujeres y niños
Providence Hospitality House, un centro de acogida de emergencia para mujeres y niños de Seattle abierto por las Hermanas de la Providencia en 1979, ha cerrado indefinidamente, debido a problemas financieros y de funcionamiento. Se mantuvo el cierre temporal previsto desde agosto.
La decisión fue tomada por el consejo de administración de Providence Pariseau con el acuerdo de la Superiora Provincial y del Consejo de las Hermanas de la Providencia, Provincia Mother Joseph. El otro ministerio patrocinado por Providence Pariseau en Seattle, Sojourner Place, seguirá ofreciendo alojamiento transitorio y servicios a mujeres solteras y embarazadas, pero también se enfrenta a retos.
«La decisión de cerrar la Casa de Hospitalidad Providence no se tomó a la ligera», declaró la Superiora Provincial Karin Dufault, SP. «Durante varios años, hemos estado luchando por encontrar la mejor manera de recaudar fondos operativos suficientes para ambos ministerios y ampliar su capacidad para mejorar la vida de la población vulnerable a la que sirven. Tras largas investigaciones, debates, oraciones, discernimiento y mucho dolor, se tomó esta decisión.»
Providence Hospitality House funcionaba en una casa unifamiliar y ofrecía alojamiento a un máximo de tres familias al mismo tiempo. El personal de 24 horas prestaba servicios de remisión para que las mujeres accedieran a prestaciones, empleo y vivienda. Las mujeres y sus hijos permanecían allí desde unos pocos días hasta ocho semanas.
Sojourner Place, fundado en 1987, está ubicado en un antiguo convento y puede albergar hasta 11 mujeres en cualquier momento. El personal del centro se encarga semanalmente de la gestión de los casos y de impartir clases de habilidades para la vida con el fin de ayudar a las mujeres a estabilizar sus vidas. Las mujeres pueden permanecer allí desde unos meses hasta dos años.
La Hermana Dufault subrayó que las Hermanas de la Providencia no renuncian a su compromiso de encontrar medios para ayudar a las mujeres y niños necesitados de Seattle, como hizo por primera vez su fundadora, la Beata Emilie Gamelin, allá por 1843 en Montreal. Providence Pariseau desarrollará un plan de 3 a 5 años para ofrecer un lugar de ministerio a mujeres y niños, incluyendo la posibilidad de buscar una asociación.
«Ofrecemos nuestro más sincero agradecimiento y reconocimiento a las numerosas Hermanas de la Providencia, asociados, voluntarios y benefactores que han acogido a las familias que han hecho de la Casa de Hospitalidad Providencia su hogar temporal, y especialmente a los antiguos alumnos del programa y a sus directores. En el momento oportuno, celebraremos una reunión y un ritual para alegrarnos de su firme apoyo y defensa del programa, pero también para llorar una pérdida que todos sentimos profundamente.»